Pronunciamiento del Colectivo Con_Ciencia Crítica*
Por este medio manifestamos nuestro desacuerdo e invitamos a la reflexión sobre el nombramiento del Dr. Enrique Cabrero Mendoza, como integrante de la Junta de Gobierno de la Universidad Nacional Autónoma de México. La legislación universitaria establece que “Para ser miembro de la Junta de Gobierno es necesario… gozar de estimación general como persona honorable y prudente”.
Sin embargo, de acuerdo a la información que ha difundido el Gobierno Federal, a través de distintos medios, el Dr. Cabrero se ha visto involucrado en una serie de irregularidades mientras fue titular del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (CONACYT) entre 2013 y 2018, que a la fecha se están investigando por las autoridades competentes y, algunas de ellas, pudieran ser incluso constitutivas de delitos.
Por ejemplo, su cónyuge Ana Díaz Aldret, fue nombrada gerente del CentroMet, un Consorcio de Estudios Metropolitanos conformado por varios centros dependientes del CONACYT, lo que constituiría un acto de nepotismo. Estos consorcios se generaron bajo una figura que no está asentada en la Ley de Ciencia y Tecnología vigente, por tanto, se les asignaron recursos de manera irregular. Basta señalar que siendo titular de Conacyt, el CentroMet fue beneficiario de 392 millones de pesos a través de un fideicomiso. Ya al cierre del sexenio pasado, en agosto de 2018, el CONACYT convocó a la creación del premio INNOVATIS, para el cual, también fue nombrada la Directora Ana Díaz Aldret.
Es legítimo que el Dr. Cabrero comparta la mirada neoliberal que unió al PAN, al PRI y demás, pero sería necesario comprender qué razones lo llevaron a dar terca continuidad a las medidas que no daban resultados, dicen que es loco hacer lo mismo y esperar resultados diferentes. Para cuando el Dr. Cabrero entra a la dirección del CONACYT ya se había realizado un estudio con los resultados del Programa de Estímulos a la Innovación (PEI) en sus primeros años y no era suficientemente claro cuáles eran los aportes específicos de este programa y ya se conocía el desplome de los indicadores en ciencia, tecnología e innovación.
Ciertamente, él mismo escribió en 1999 “De administrador público a gerente público”, donde plantea, quizás ingenuamente, que poner la gestión de lo público en manos del sector social y del sector privado (vaya uno a saber las diferencias) es solamente buena administración, no contaminada con el populismo. Durante la hegemonía de esta mirada, que en muchas formas continúa hoy, se legitimaron procesos de liberalización y privatización que dejaron atrás la búsqueda de conocimiento y del bien común. Se creó un terreno de indeterminación y confusión conceptual y lingüística muy útil para dar prioridad a las empresas. Así, la concepción de la educación como servicio y no como derecho y, el concepto Instituciones de Educación Superior (IES) diluyendo la importancia del carácter público o privado de dichas instituciones. Pero también, las instituciones de educación superior se concibieron como “empresas educativas”, se desarrollaron en ellas “empresas universitarias”. La mezcla entre instituciones de investigación, de educación superior y empresas fue sumamente borrosa y colocó a las primeras al servicio de las segundas, implicando no solamente los recursos, sino los procesos de investigación e incluso, en algunos casos, la asignación de personal académico a empresas privadas. En ese mismo marco puede comprenderse la privatización de la administración de los Fideicomisos del CONACYT y también de las formas de participación de académicas y académicos privatizada a través del Foro consultivo A.C.
Así, el Dr. Cabrero da continuidad a estas políticas, fortaleciéndolas. Fue director del CONACYT durante el gobierno de Enrique Peña Nieto (2013 a 2018). Es decir, 25 años después de que Zedillo otorgara crédito fiscal -léase crédito como un eufemismo, en verdad operaba en la forma de subsidio- a las empresas que llevaban a cabo actividades de ciencia y tecnología y 11 años después de que Vicente Fox, promulgara la ley que actualmente rige. Dicha ley ya tiene 8 modificaciones, una de ellas (2015), muestra la prioridad que el Dr. Cabrero le concedió a las actividades con ánimo de lucro, incluyendo las relaciones con grandes empresas extranjeras. Respecto a lo anterior, el término innovación adquiere aquí una importancia central, la ley del 2002 contenía 19 menciones al término, para el 2015 la palabra innovación queda plasmada, literalmente, más de una vez por página, en total, 179 veces.
El Dr. Cabrero se destaca como director del CONACYT número uno en los siguientes aspectos:
1.- Es el director del CONACYT que más ha transferido recursos públicos al sector privado ya que de cerca de los 76 mil millones de pesos que se transfirieron a la empresa privada, desde 1999 a 2018 vía los Programas Estímulo Fiscal y Estímulos a la Innovación (PEI), el Dr. Cabrero transfirió a través de éstos cerca de 34 mil millones, o sea, el 44.7 % del total, durante su periodo administrativo.
2.- El PEI es un estímulo directo, en dinero líquido, creado por Felipe Calderón[1], que destinaron exclusivamente para empresas con ánimo de lucro, a fondo perdido. Los anteriores exdirectores del CONACYT transfirieron cerca de 11 mil millones a estas empresas, mientras que Enrique Cabrero cerca de 20 mil millones, esto es, el actual miembro de la Junta de Gobierno de la UNAM entregó el 65% del dinero público que el CONACYT ha transferido al sector privado por conducto del PEI.
3.- Si los anteriores directores del CONACYT otorgaban el Estímulo Fiscal o el Estímulo a la Innovación, uno u otro, el Dr. Cabrero fue el director más generoso, transfiriendo ambos beneficios a las empresas, en los dos últimos años de su administración.
4.- El PEI otorga recursos a empresas pequeñas, medianas y grandes, lo que nos permite ver no solo el monto sino también la distribución. El Dr. Cabrero fue quien más benefició a las grandes empresas, así en términos de proyectos aprobados la modalidad PROINNOVA creció desde el 35% en 2009 al 70% en 2017 y más importante aún, del 16% en 2009 al 75% del presupuesto del PEI en el año 2018.
En la siguiente tabla puede verse el porcentaje otorgado durante el periodo de Cabrero a algunas grandes empresas extranjeras:
Monto suministrado a algunas empresas extranjeras durante 2009 a 2012 y Monto en porciento transferido por Enrique Cabrero durante 2013-2108 | |||
EMPRESA | 2009-2012 | 2013-2018 | % Periodo Dr. Cabrero |
BAYER DE MEXICO, S. A. DE C. V. | $ 28,602,023.64 | $ 18,205,272.00 | 63.7 |
CUMMINS GRUPO INDUSTRIAL, S DE RL DE CV | $ 1,779,329.00 | $ 1,779,329.00 | 100.0 |
CUMMINS S. DE R.L .DE C.V. | $ 61,071,934.50 | $ 34,040,468.00 | 55.7 |
GKN DRIVELINE CELAYA, S.A. DE C.V. | $ 60,615,105.24 | $ 39,809,547.00 | 65.7 |
HONEYWELL AEROSPACE DE MÉXICO, S. DE R.L. DE C.V. | $ 45,795,682.08 | $ 21,948,963.00 | 47.9 |
HONEYWELL AEROSPACE DE MÉXICO, S. DE R.L. DE C.V. | $ 5,462,560.00 | $ 5,462,560.00 | 100.0 |
HONEYWELL AEROSPACE SYSTEMS LABORATORY COMPANY S. DE R.L. DE C.V. | $ 14,941,023.25 | $ 990,419.00 | 6.6 |
HONEYWELL INGENIERÍA Y TECNOLOGIA AEROESPACIAL DE MÉXICO S. DE R.L DE C.V. | $ 38,577,537.00 | $ 38,577,537.00 | 100.0 |
HONEYWELL MANUFACTURAS DE CHIHUAHUA, S. DE RL DE CV | $ 5,375,899.58 | $ 4,612,128.00 | 85.8 |
IBM DE MÉXICO COMERCIALIZACIÓN Y SERVICIOS S. DE R.L. DE C.V. | $ 54,409,542.72 | $ 23,343,727.00 | 42.9 |
INTEL TECNOLOGIA DE MEXICO, S.A. DE C.V. | $ 202,217,487.99 | $ 72,000,000.00 | 35.6 |
JOHNSON CONTROLS QUERETARO S. DE R.L. DE C.V. | $ 1,708,697.00 | $ 1,708,697.00 | 100.0 |
KIMBERLY CLARK DE MEXICO, S.A.B. DE C.V.* | $ 3,494,808.62 | $ 3,494,808.62 | 100.0 |
KRAFT FOODS DE MÉXICO S DE RL DE CV | $ 33,545,840.00 | $ 19,819,040.00 | 59.1 |
VOLKSWAGEN DE MEXICO, S. A. DE C. V. | $ 132,334,555.00 | $ 89,882,840.00 | 67.9 |
*Kimberly Clark de México recibió un total de $36,000,000.15 del 2009 al 2013 |
Ramírez (2013) señaló que el apoyo líquido que recibieron las diez más importantes empresas extranjeras el 2013 era mayor que el presupuesto aprobado para el combate a la pobreza en Michoacán.
5.- El Dr. Cabrero creó en el 2014, 23 Consorcios y cerca del 60% del presupuesto de estos se destinó a infraestructura en las regiones, algunas construcciones quedaron inconclusas y aún no queda claro cuál fue su utilidad.
Pero el asunto problemático con el Dr. Cabrero no es conceptual, económico o político sino administrativo, la profesión que profesa el exdirector del CONACYT. El problema de fondo, no son esos gastos o, si se prefiere, este récord de gastos, sino que fueron hechos con el propósito de incentivar la participación privada en el gasto de ciencia y tecnología y eso, no estaba sucediendo, ni menos aún sucedió, durante los 6 años de la administración de Enrique Cabrero.
Así, mientras que el Gobierno incrementó su porcentaje de participación en el Gasto en Investigación y Desarrollo Experimental (GIDE) del 60% en 1999 al 71% en el 2016, la participación del sector privado especialmente desde el 2009 -es decir, cuando se introdujeron los estímulos directos-, bajaba año con año.
México: disminución porcentual de la participación privada en investigación y desarrollo, 1999-2015
Año | Porcentaje del pib como gasto en investigación y desarrollo financiado por el sector empresas privadas de negocios | Porcentaje del gasto en investigación ydesarrollo financiado por empresas privadas de negocios | Porcentaje del pib como gasto en investigación y desarrollo financiado por el sector gobierno | Porcentaje del gasto en investigación ydesarrollo financiado por el sector gobierno | Porcentaje del gasto en investigación ydesarrollo financiado por otras fuentes nacionales | Porcentaje del gasto en investigación ydesarrollo financiado por el resto del mundo |
2009 | 0.2 | 33.8 | 0.3 | 56.3 | 8.4 | 1.5 |
2010 | 0.2 | 32.9 | 0.3 | 62.3 | 4.3 | 0.5 |
2011 | 0.2 | 32.3 | 0.3 | 63 | 4.1 | 0.6 |
2012 | 0.1 | 24.5 | 0.3 | 67.8 | 7.3 | 0.4 |
2013 | 0.1 | 21.0 | 0.4 | 70.7 | 8.0 | 0.4 |
2014 | 0.1 | 19.5 | 0.4 | 71.8 | 8.4 | 0.4 |
2015 | 0.1 | 19.7 | 0.4 | 70.3 | 9.6 | 0.5 |
Pero más serio aún, en el siguiente cuadro puede verse como decrecieron los indicadores en innovación, inexplicable a la luz de los datos enseñados arriba:
México: evolución de los indicadores 1 a 7 del Pilar Innovación del índice global de competitividad, 2007-2016 | ||||
Indicador | 2013-2014 | 2014-2015 | 2015-2016 | 2016-2017 |
1.. Capacidad de Innovación | 75 | 72 | 66 | 67 |
2. Calidad de las instituciones de investigación científica | 54 | 58 | 47 | 44 |
3. Gasto privado en I&D | 61 | 71 | 73 | 76 |
4. Colaboración Universidad-Industria en I&D | 44 | 44 | 43 | 52 |
5. Compras gubernamentales de productos tecnológicos | 63 | 76 | 88 | 88 |
6. Disponibilidad de científicos e ingenieros | 77 | 78 | 63 | 55 |
7. Solicitud de patentes por millón de habitantes | 57 | 58 | 57 | 60 |
Fuente: Elaboración propia con base en gci dataset in Excel (http://r3eports.wefo-rum.org/global-competitiveness-index/downloads/) | ||||
Libro: La ciencia al servicio de la Mercancía en México, p. 117 |
El Dr. Enrique Cabrero, por su relación con el poder y por su perfil académico forma parte de un grupo de élite que por más de 30 años impulsaron un modelo de administración neoliberal de la ciencia, que lejos de contribuir a forjar un país competitivo, han dejado claras evidencias de rezago, dependencia y corrupción. Es promotor de un modelo de ciencia ideologizada que no compartimos la mayoría de los universitarios.
Resta reiterar nuestro extrañamiento y protesta frente al nombramiento del Dr. Enrique Cabrera y solicitamos que su incorporación se postergue hasta que las autoridades competentes hayan realizado la investigación y determinado si es culpable de los delitos que se le imputan.
* El Colectivo Con_Ciencia Crítica. Por el Conocimiento como Bien Común, está compuesto por académicos y académicas de diversas instituciones públicas de México. Para mayor información, suscripción a comunicados e integración al Colectivo: https://con-cienciacritica.org/. Si quiere unirse a este reclamo puedes hacerlo en: https://forms.gle/Gsj641PYzpEQufKn7
[1] En el sexenio de Felipe Claderón se comenzó a dar el 30% del estímulo del SNI a los trabajadores de las instituciones privadas, el 70% restante era otorgado por dichas instituciones. Durante el periodo del Dr. Cabrero el Estado mexicano comenzó a otorgar a las Universidades privadas el 100% del estímulo.