Número 260. Año 2016-4

LUCHA DE CLASES Y DERECHIZACIÓN

LUCHA DE CLASES. EL CONFLICTO IRREBASABLE
GERARDO DE LA FUENTE LORA

DERECHIZACIÓN, POPULISMOS Y LUCHA DE CLASES. CONSIDERACIONES COYUNTURALES
MASSIMO MODONESI

LAS ANTINOMIAS DE LA CONCIENCIA DE CLASE DE CUELLO BLANCO
MATARI PIERRE MANIGAT

OLIGARQUÍA Y ESTADO EN EL MÉXICO DE HOY
ARTURO GUILLÉN

LA PRECARIEDAD DEL TRABAJO EN MÉXICO DURANTE EL NEOLIBERALISMO
ABELARDO MARIÑA FLORES

EL IMPERIALISMO DEL SIGLO XXI
JOSEFINA MORALES

LUCHAS DE CLASES Y FRACTURAS DEL SUJETO EN EL ACTUAL DRAMA LATINOAMERICANO
DAVID PAVÓN-CUÉLLAR


MUNDO

LA RESTAURACIÓN AVANZA, LA RUPTURA TAMBIÉN
MANOLO MONEREO


AMÉRICA LATINA

AMÉRICA LATINA Y BRASIL: VUELCO A LA DERECHA Y CRISIS POLÍTICA
LUCIO OLIVER

NOTAS SOBRE LA NATURALEZA DE CLASE EN LA ACTUAL CRISIS BRASILEÑA
DANILO ENRICO MARTUSCELLI

EL SUSPENSO DE LA SOLUCIÓN DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA
DIEGO JARAMILLO SALGADO

ECUADOR: ESCENARIO ELECTORAL Y DISPUTA DE LA TRANSICIÓN
ALEJANDRA SANTILLANA ORTIZ


PENSAMIENTO CRÍTICO

¿QUIÉN LE TEME A VIRGINIA WOOLF?
TONI NEGRI

LA CRISIS DE LA MODERNIDAD REQUIERE UNA TRANSFORMACIÓN CIVILIZATORIA
VÍCTOR MANUEL TOLEDO


LIBRERO

RAQUEL TIBOL
ALBERTO HÍJAR SERRANO

EL REGRESO DEL CAMARADA RICARDO FLORES MAGÓN
ISRAEL G. SOLARES

RELEYENDO A MARX Y FREUD
CARLOS BARBA SOLANO


PABLO O´HIGGINS

En esta ocasión, Memoria se engalana con la obra gráfica de un grande del muralismo mexicano: Pablo O’Higgins (Salt Lake City, 1904-Ciudad de México, 1983).

Cuando O’Higgins tenía 20 años conoció en cierta revista el mural que Diego Rivera plasmaba en la Escuela Nacional Preparatoria. Escribió a éste una carta elogiosa y, para su sorpresa, a las dos semanas recibió de él una respuesta: “Un joven pintor debe venir a México para que conozca el movimiento de pintura que está naciendo”. O’Higgins hizo las maletas, y acá se quedó.

Se hizo muralista, grabador, mexicano, militante y comunista. O’Higgins comprometió su vida con las luchas sociales de su tiempo, participó en memorables campañas antifascistas y antiimperialistas, se subió a los andamios, y en escuelas y mercados dejó su obra mural más relevante. Participó en la fundación de la Liga de Escritores y Artistas Revolucionarios y, poco después, acudió al llamado de Leopoldo Méndez para crear el Taller de la Gráfica Popular.

Con estilo propio, O’Higgins dejó una obra llena de obreros y campesinos, mujeres y niños trabajadores, retratos de un pueblo esforzado y agotado por la faena. Su militancia lo alejó de estetizar la pobreza y la desgracia. Su obra transpira compromiso y cercanía con los hacedores de la riqueza; esta sensibilidad y esfuerzo marcaron a una generación de artistas decidida a ser pueblo y no ver desde la barrera la vida de los trabajadores.